La AV es una malformación congénita poco frecuente, abarca un amplio espectro y se asocia a malformaciones renales(MR). El diagnóstico es tardío, siendo su estudio y tratamiento un desafío.
MÉTODO: 15 pacientes entre 1999 y 2006, analizando edad, motivo de consulta, estudio, diagnóstico, tratamiento y complicaciones.
RESULTADOS Y DISCUSIÓN: El diagnóstico fue tardío, aun cuando la inspección vulvar proporcionaba alta sospecha. Ecografía, Resonancia Magnética y Laparoscopía diagnóstica fueron estudio de elección. Hubo MR en 7casos (3monorrenas/2ectopias/2agenesias renales). El tratamiento dependió del tipo de AV (total o parcial): 3casos con dilatación proximal vaginal se realizó descenso; 2casos con 2/3 distales ausentes, mínimo segmento proximal y cuello uterino normal realizamos interposición intestinal; 6casos se realizó reemplazo intestinal total (4agenesias completas y en 2 con vagina proximal y cuello uterino no adecuados se asoció histerectomía); 1caso con vagina doble se realizó plastía con resección de tabique. En 2casos con segmento distal de 3 y 4 cm indicamos dilataciones exclusivas . 1caso aún sin cirugía.
COMPLICACIONES: 1 caso requirió histerectomía alejada por metritis y estenosis anastomótica. La vaginopexia disminuyó el prolapso (1caso). Con menor longitud del asa (10-12cm) y aseos vaginales diarios, la mucorrea fue escasa.
El diagnóstico tardío pone en evidencia la carencia de adecuada inspección vulvovaginal, siendo importante destacar el examen genital de rutina en la niña.
El tratamiento es variable y requiere adecuado diagnóstico con apoyo imagenológico por radiólogo especializado, para disminuir las complicaciones.
Creemos que a pesar de la complejidad técnica, la calidad de vida con la enterovaginoplastia es adecuada.
El tiempo se seguimiento es breve para analizar función, satisfacción sexual, autoestima e imagen corporal. |
