Volumen 3 número 3 - Diciembre 2006
ISSN 0718-0918
Tabla de Contenidos > Editorial
Revista Pediatría: de la publicación científica impresa a la electrónica
Dr. Armando Díaz Cruz
Servicio de Pediatría Hospital Roberto del Río
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"Explicar y hacer comprender lo que pretendemos no es cosa fácil pues jamás
se comprende lo que es nuevo sino es por analogía con lo que es viejo"
Francis Bacon, Novum Organum Scientiarum, 1620

"Si he visto mas lejos es porque estaba encaramado sobre los hombros de un gigante "
Isaac Newton, Philosophiae Naturas Principia Mathematica, 1687.

Shen Nung, el Emperador de Fuego, reinó en China 2800 años AC y se considera el fundador de la Medicina China. El desarrolló el Pen-Ts-ao, "Materia Medica", conjunto de conocimientos que se mantuvo mas de 10 siglos solo por transmisión oral, gracias a la increíble técnica pedagógica china de memorizar al detalle extensísimos parlamentos, y solo se dispuso de una versión escrita 1800 años AC. En otro lejano país los egipcios escribieron 1500 años AC papiros que trataban temas médicos, de los que aun se conservan 14 en museos de Europa y Estados Unidos.

Tanto el conocimiento medico transmitido en forma oral como los primeros escritos solo estaban al alcance de muy pocas personas, sacerdotes o miembros de escuelas selectas. Siglos después, en la Edad Media , los conocimientos que iban constituyendo el saber humano eran manuscritos por monjes y permanecían en bibliotecas de algunos monasterios o en las primeras universidades que ya se estaban fundando en Europa. Todavía era un limitado grupo selecto el que tenia acceso a estos valiosos archivos: clérigos, grupos favorecidos de estudiantes o miembros de las Cortes reales.

Los científicos de ese tiempo generalmente trabajaban también al alero de esas Cortes y lograban comunicarse entre si por correspondencia manuscrita trasladada de una otra Corte generalmente por correspondencia diplomática. Se conservan comunicaciones de este tipo, que eran prácticamente la única forma de difusión del saber y de intercambio científico.

En 1436 Gutemberg inventó la imprenta, que permitiría una revolucionaria difusión de comunicaciones„ pero que también al principio fue lenta y circunscrita a medios aristocráticos o eclesiales que, al tener el poder, manejaban la difusión del conocimiento.

En 1622 y en forma casi simultanea se fundaron las 2 primeras Sociedades Científicas: la Royal Society of London y la Academie de Sciencies de Paris. Dos años después aparecieran las 2 primeras publicaciones periódicas o revistas médicas: Transactions of The Roya] Society of London y el Journal des Scavans en Francia. Estos, para entonces portentosos medios, aceleraron en forma importante la difusión del conocimiento al registrarlo en forma responsable, estableciendo definitivamente el concepto de autor y la fecha de cada comunicación científica y permitiendo una amplia difusión de los descubrimientos e incluso debates conceptuales. Ahora sí llegaba la revolución que significó importantes modificaciones culturales, sociales y económicas.

Una revolución mucho mas trascendente se esta desarrollando ahora ante nosotros desde la década del 90, al irrumpir cada vez con mas ímpetu la difusión de textos electrónicos, que ya llegó a una total globalización con Internet. Esta globalización significa grandes desafíos que exigen nuevas formas de entender acontecimientos e ideas y de proponer soluciones. Todas las actividades humanas, las formas de sociabilización y las costumbres están adquiriendo un nuevo aspecto que se puede resumir en una sola letra: "e", la misma "e" de los ya familiares e-mail. Para lograr seguir siendo competitivos en un mundo cada vez mas pequeño debemos entronizarnos en una nueva terminología y una nueva dinámica.: estamos ya inmersos en un mundo en que los roles protagónicos los desempeñan la e-economía con sus e-transacciones en un e-mercado, en un e-arte con sus e- espectáculos, en un e-turismo. En el e- aprendizaje y fundamentalmente en el e-conocimiento, todo esto regido por inimaginables redes electrónicas instantáneas y de bajo costo, como por ej.: Internet. Estamos viviendo cada vez mas en un e-mundo.

En este sentido se está analizando la revolución que la e-tecnología significa para las publicaciones medicas periódicas. Ya las revistas mas prestigiosas y clásicas iniciaron versiones "on line", generalmente disponibles a texto completo solo para suscriptores, lo que significó una ampliación del negocio de las grandes editoriales asentadas en los países desarrollados, y uno de los grandes problemas de los países en desarrollo ha sido el permanente encarecimiento de las suscripciones a las revistas medicas de prestigio. Se instala un circulo vicioso en que el alto precio disminuye los suscriptores mientras la disminución de suscriptores a su vez aumenta los precios., y esto no solo con repercusión individual en un usuario sino, lo que es peor, a nivel de las bibliotecas, y mas aun en las bibliotecas de los países subdesarrollados. Este importante problema lo esta abordando a nivel mundial UNESCO y a nivel local diversas instituciones, en Chile principalmente CONICYT.

Afortunadamente han aparecido iniciativas para editar publicaciones periódicas (revistas) con solo edición "on line" y de acceso gratuito. Justamente en Chile hay una exitosa experiencia que sé cita como ejemplo de lo que se puede realizar en un país en desarrollo: el Electronic Journal of Biotechnology (EJB) . Esta es una publicación científica que cumple las mas altas exigencias de calidad, con Comité de Redacción amplio y estricto que incorpora revisores internacionales, editada en nuestro país desde 1998. Se trata de un proyectó conjunto de la Universidad Católica de Valparaíso y CONICYT que asumió el desafío de iniciar desde cero una publicación científica acorde con los mas altos estándares, sin versión en formato impreso, evitando el alto costo de la edición y distribución de los impresos convencionales. Con la intención de alcanzar una extensa cobertura y así significar un estimulo para los colaboradores el EJB publica artículos de revisión y de investigación relacionados con todas las áreas de la biotecnología, como ingeniería genética, biotecnología humana, animal, vegetal, ambiental, marina, además de temas computacionales y de ética, y todo se publica en inglés. El resultado ha sido excelente: enorme cantidad de visitas por usuarios de todo el mundo, y presencia de EJB en gran numero de bibliotecas de países desarrollados , tan relevantes como la Universidad de Harvard y el Instituto Pasteur de Paris. Experiencias como EJB indican como se puede llegar a una real democratización mundial del conocimiento.

En nuestro Hospital Roberto del Río, en forma mucho mas modesta, en el año 2004, ante la permanente dificultad de financiamiento de la revista Pediatría, fundada en 1957 por el Profesor Julio Meneghello, con el prestigio de 47 años de interrumpida publicación, se decidió, con el apoyo tecnológico de la U. De Chile, continuarla como Pediatría Electrónica, publicación oficial del Departamento de Pediatría y Cirugía Infantil de la Sede Norte de la Facultad de Medicina de la U. De Chile y del Hospital Clínico de Niños Roberto del Río. Después de 2 años de su inicio se puede decir que Pediatría Electrónica ha cumplido con creces el rol que se esperaba, habiéndose editado ya 7 números y cumpliendo las múltiples exigencias requeridas para que una publicación de este tipo sea aceptada como tal. Cada número significa un trabajo invisible iniciado con la recopilación y revisión de artículos, edición cuidadosa en mil detalles como uniformidad de estilo y tipografía, ortografía, calidad de las ilustraciones y tablas, exactitud de las citas bibliográficas, etc., todo lo cual ha sido trabajo continuo en horas "libres" de la Dra. Catalina Mihovilovic. Como si esto fuera poco ella ha agregado "preciosismos electrónicos" como la instalación de enlaces desde todas las citas bibliográficas a las versiones completas de los artículos que disponen de acceso gratuito.

El Departamento Universitario de Pediatría, el Hospital Roberto de Río, todos los autores que han publicado en Pediatría Electrónica, y por supuesto todos los lectores que se han beneficiado del libre acceso a los artículos deben un enorme reconocimiento a la Dra. Mihovilovic , quien por acceder a un cargo que requiere gran dedicación debió dejar la Dirección de esta Revista. Se puede fehacientemente decir que si Pediatría en sus 47 años de versión impresa tenia un bien ganado prestigio, Pediatría Electrónica ya tiene un merecido lugar en el ciberespacio y como publicación medica periódica electrónica de acceso gratuito es realmente una obra pionera en nuestro medio. Todo lo expuesto nos obliga a continuar por la misma ruta tan exitosamente señalada.

Dr. Armando Díaz Cruz
Servicio de Pediatría
Hospital Roberto del Río

Revista Pediatría Electrónica
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